martes, 22 de septiembre de 2015

COMENZAMOS DIARIO 21 de septiembre de 2015

Eran las doce pasadas, poco más de media noche. Ya era el día 21 de septiembre, el otoño ha comenzado otra vez y la rutina vuelve. Estaba en la cama leyendo el Manifiesto Comunista de Marx y preocupado por lo que pudiera pasar ese día. Que si los compañeros no me cayeran bien, que si me preguntaran algo y tartamudearía, aunque eso no me ocurre desde hace mucho tiempo, pero cuando hay un cambio tan significativo en mi vida como ese, todo puede ocurrir.

 Ya eran las 2 y ya iba a entrar en un sueño profundo, pero acabé pensando en una canción, esta canción:
https://www.youtube.com/watch?v=Y58xMOx-qsQ
Mi parte favorita es una que dice así, son todas corcheas y una sincopada: el LA
MI-RE-MI-LAAA-SOL RE-DO-RE-LAAA-SOL
En ese momento perdí la noción del sueño, me puse con la guitarra a sacar esas notas, pero bajito. Estoy mu loco, sí.

 Después me dieron las 3 y me entraron ganas de comer, fui a la cocina a comer pisto, yogur y pan. Y me volví a meter en la cama. No me dormí hasta las 4 y me pareció muy excaso el tiempo en el que oí a mis padres andar por el pasillo. YA ERAN LAS 8 MENOS DIEZ!!!

 Entonces me puse las zapatillas de trail, para salir a correr por el campo así como hacer un poco de cross. Mi madre en cuanto me vió... casi se arma una... pero mi madre se lo tomo bien, y máxime cuando salí y volví dentro de 3 minutos, tan sólo había dado la vuelta a la manzana. Mi madre me dijo: "Ala, que pronto has vuelto". Entonces la vi contenta. Antes de ir a correr ya había desayunado, pero no desayuné nada por lo visto no quieren mis padres que desayune, es lo que "nadie" quiere, porque por lo visto yo no soy nadie. Sólo unas pastas y leche. Eso y nada todo es uno.

 En fin, me duché y me preparé. Le pedí a mi madre una camiseta de Champions y por lo visto no las habías buscado. Y marchamos con la salida del sol, poco después del amanecer. Parece que estos días ya a finales de septiembre está amaneciendo tarde, eso es bueno, se acerca el invierno.

 Y entonces llegamos a la uni, me dejó en la facultad y entré y me puse a leer a Marx. Ahí no había silencio, no se podía hacer nada. Todo el mundo contando sus batallitas veraniegas, y también oí un comentario muy desafortunado sobre los japoneses de la universidad. ES QUE LOS JAPONESES ME DICEN A TODO QUE SÍ, LES DIGO ¿QUE TAL? Y DICEN SÍ, LES DIGO TAL Y DICEN SÍ SÍ SÍ.

 Entonces pensé ya en a ver con quién me tocaba y entonces entró un conocido mío del conser, Marcos García, todo un personaje. Ya eran las 10 menos cuarto y entonces dijeron a una chica de historia del arte: "Los de primero ya van a pasar para la sala". Y entonces salí despavorido para la sala. Nos dieron la charla de bienvenida, que me gustó mucho por cierto. Hablaron 6 personas. Los cinco primeros traían ropas más conservadoras y el último un peinado con coleta y ropa más progre. Este último también dijo que no le gustaba nada usar el micrófono. Mi madre hubiese dicho que es del porcentaje.

 Cuando salimos de la sala nos mostraron a los tutores de todas las carreras. Nuestra tutora no había aparecido todavía porque estaba con el café. Algo que debería ser ilegal. ¡¡¡sXe!!!

 Luego la bibliotecaria nos mostró todas las bibliotecas y salas de estudio, una persona muy maja por cierto.
Yo me quedé atrás un momento por el sol y me dijo: "Qué, vamos". Ahí se notó que se ocupa de la gente.
Luego nos enseñó otra zona de estudio. Al terminar el tour nos llevaron para clase, hicimos una encuesta y ahí terminó todo.
 Salimos a las 12:05 me encontré con Ana Lis que me preguntó que tal mi primer día.Yo dije que bien.
Y me fui a casa de mi abuela tragándome el sol. y ME PUSE A LEER EL LIBRO DE MARX! A las 14:10 comí, y sin hacer la digestión me metí en el sobre hasta las 18h.

 Entonces llegó mi madre a casa de mi abuela y me dijo que teníamos que ir a donde al abogada. Fuimos y llegamos pronto, a las 18:50 cuando habíamos quedado a las 19h. Entonces me dijo hasta la saciedad que cerrara la boca.

 Vino la abogada y nos mandó pasar. Nos dijo que no nos preocupáramos que todo iba a salir bien. Que al principio los policías intentaron dar mucha pompa al juicio. Y nos dijo que ella no podía ir, pero que iba a ir un compañero que lo iba a hacer mucho mejor que ella. Nos describió como era para que no hubiera problemas en encontrarnos. 

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